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Si tu algoritmo te deja, habrás podido ver últimamente en tu Instagram una serie de camiones de la compañía DHL sellados a fuego con un montón de piezas maravillosas. Solemos hablar de la magia del graffiti en movimiento refiriéndonos a trenes, posicionándolos en lo mas alto del podium de los escritores de graffiti. Pero ojo, dejarse ver es una de las máximas de esta cultura y estos camiones pintados entienden y entregan ese mensaje a la perfección y a la hora acordada.
Así que nos alegramos de poder decirte: “tenemos un paquete para ti”.

No hay un ejemplo más claro de que estás en una gran ciudad, que el nivel de graffiti que se puede ver en sus calles. Estas piezas sobre furgonetas de reparto tienen el añadido de llegar a todas partes, llevando el estilo a lugares inesperados. La fusión de colores vibrantes y formas dinámicas contrastan, como un buen bofetón, con el amarillo chillón que caracteriza a la compañía DHL.

Estilos variados que permiten tomar el pulso de la escena de graffiti alemana en la urbe, que capturan la atención de espectadores fugaces, ofreciendo instantes de creatividad. Estas gotas de estilo cuentan historias a través de una narrativa visual en constante transformación. Son una huella efervescente en el paisaje urbano.

De entre el montón de camiones pintados hemos seleccionados unas cuantas fotos como ejemplo de lo que te puedes encontrar circulando por ciudades como Hamburgo o Berlín. Nombres como los que ves aquí, Taps, Moses, Otis, Code, Cario y un largo etcétera.